La primera vez

En estos días hablaba con una señorita sobre lo qué pensaba con respecto a la primera vez (encuentro íntimo) y cuándo creía que era el momento más indicado para vivir esa experiencia. Me llamó mucho la atención lo que me respondió: “Pues rico, hay que hacerlo cuando uno encuentre a alguien que lo complemente”. Me pareció una respuesta sincera, ya que a pesar de saber que mi planteamiento se basa desde la espiritualidad y que indica la Iglesia, ella no tuvo reparo en decir lo que pensaba realmente. Basándome en su respuesta, quisiera proponerte algunas características que debe tener esa primera vez:

  1. “RICO”

Es una palabra tan común que se utiliza para definir algo que es agradable. Creo que la intimidad debe ser eso: agradable. No se puede forzar a nadie a tener un encuentro íntimo  por la presión social o porque tu pareja te exige una “prueba de amor”. Tener intimidad implica que vas a querer disfrutar no solo un simple momento de placer, es más bien poder hacer sentir a tu pareja que es importante y que respetas su vida, más aún en ese aspecto. No es llegar a desahogar tu carga sexual y ya, es buscar comprender qué significa para tu vida y cómo va a afectarla de manera positiva o negativa. Porque no es lo mismo que decir ¡que rico estuvo ese helado! Ya que la sexualidad es algo que implica la vida misma.

  1. COMPLEMENTO

Personalmente tengo problema cuando se usa esa palabra para referirse a una relación de pareja, porque a veces se puede entender que eres un ser incompleto y necesitas de alguien para ser una persona entera. Dios te hizo perfecto y tu pareja no viene a llenar los vacíos que tienes desde tu infancia, ese no es su papel; como diría la Biblia, es la ayuda idónea. Pero también sé que cuando se habla de complemento se refiere a esa persona que sabe hacer que tu vida sea mejor de lo que ya es. No se limita únicamente a la parte íntima, ya que eso sería solo una relación superficial. El problema muchas veces nace cuando las parejas basan su relación solo en los momentos de erotismo y se olvidan que la comunicación, comprensión, espiritualidad y demás es importante.

  1. PARA TODA LA VIDA

Este último punto lo extraigo de la posterior conversación que tuvimos después de su respuesta sincera, ya que ella me decía que lo ideal sería pasar el resto de la vida con él. En este caso creo que cuando alguien decide pasar su vida con una persona, significa unirse en matrimonio, puesto que si quieres compartir la vida con tu pareja, lo que se debe hacer es unirse en el sacramento. Es un mito creer que casarse arruina el “matrimonio”, lo que realmente lo destruye es no haberse preparado y decidido con madurez. No es unirse fisicamente porque nos queremos, es más bien porque nos queremos, sabemos esperar y decidir cuando casarnos.

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Cuándo, dónde y con quién tener tu primera experiencia íntima depende únicamente de ti, pero eso no significa que puedes hacer con tu cuerpo lo que quieras, ya que quien se lastimará serás tú. Debes reflexionarlo y no solo dejarte llevar por las sensaciones. Te propongo estos tres puntos que te pueden ayudar a tomar la mejor decisión sobre tu sexualidad. 

César Peña

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