Hay días en los que las personas creen que Dios no está a su lado o que esa necesidad que tienen no será posible alcanzarla. Te cuento que todos pasamos por eso, donde pareciera que Dios no puede hacerlo.
Creo que es lógico creer que no hay esperanza en ciertas circunstancias duras que se viven, ya que muchas veces vienen una tras otra y cada vez más oscuras. Es en este momento que el ser humano experimenta su más terrible fragilidad, ya que pareciera que no hay ni una sola salida y que cada alternativa planteada se viene a pique.
Muchos con toda propiedad me pueden decir que es sencillo decirlo, y la verdad es cierto: decirlo es muy sencillo. Pero al igual que tú, he sufrido dificultades en la vida; sé lo que es llorar cuando no se encuentra otra salida, he vivido la desesperanza, la soledad también ha invadido mi alma y en muchas ocasiones creí que no había porque luchar más.
No ha sido fácil poder creer en medio de una dura realidad, y no espero que creas solo por leer esto, es más bien que al igual que yo recuerdes que Dios lo hizo alguna vez, por lo que puede hacerlo de nuevo. No olvides aquellas ocasiones cuando creíste que ya todo estaba perdido y pasó algo que lo cambió todo. Esos momentos en los que aparecieron las personas y circunstancias adecuadas para que puedas salir adelante.
Puede que hoy creas que no hay ninguna salida para aquella situación que vives; pero de alguna manera todo cambiará, porque Dios siempre está de tu lado.
No será por arte de magia que tu vida sea diferente, debes hacer algo para que empiece a suceder; pero nunca olvides que el primer paso es creer.
Dios lo hizo en la Biblia, en los demás, en tu vida y la mía. Es por eso que la confianza debe ser tu baluarte y así con la más profunda convicción puedas decir: Dios puede hacerlo de nuevo.
Muchas gracias César. Estaba pensando que no tenía esperanza, pero al leer esto Dios me recordó que siempre es posible. Dios te bendiga…